Twitter sigue siendo una de las redes sociales con mayor índice de impacto en internet. Los usuarios -en su mayoría adultos, según las estadísticas- usan a diario esta red para estar al día de los últimos acontecimientos que suceden en el mundo. Además, muchos la utilizan también para compartir con sus seguidores lo que están haciendo en un determinado momento, comentar con ellos alguna noticia interesante, e incluso bromear sobre estas. Así, cuentas como @norcoreano, @superfalete, @laquintacolumna, @DeAlmeriayOle, @coponnn o @gerardotc tienen como principal objetivo arrancar las sonrisas y carcajadas de sus seguidores.
Tuit 1
De acuerdo con Pano y Macera (2014), el humor y la ironía en twitter pueden servir tanto para fortalecer las relaciones sociales entre aquellos que aprecian el contenido humorístico (tuit 2) como para distanciarse y criticar determinadas situaciones de actualidad política o social (tuit 3 y 4).
Tuit 2
Tuit 3
Tuit 4
Este tipo de humor en microblogging se produce normalmente debido a una ambigüedad semántica, que se fomenta por medio del juego de palabras con indicadores como la polisemia (tuit 5), la paronimia, las locuciones o las unidades fraseológicas. Además, esta se refuerza, en ocasiones, a través de imágenes, giffs y marcas humorísticas como el uso de estilo directo (tuit 6), las mayúsculas o los distintos signos de puntuación.
Tuit 5
Tuit 6
Así pues, conseguir el efecto perlocutivo deseado en el lector, es decir, divertirle y hacerle reflexionar sobre la realidad política y social del momento, requiere tanto que el lector conozca el tema sobre el que trata el tuit como que cuente con las habilidades cognitivas necesarias para inferir el humor y la ironía del mensaje, a través de diversos indicadores y marcas humorísticos.
Tuit 7
Por otro lado, hemos observado cómo debido al reducido número de palabras que se pueden emplear en el tuit, la incongruencia generada no se resuelve de forma explícita por los mecanismos lógicos sintagmáticos propuestos por Attardo. Hempelmann y Di Maio (2002), sino que suelen ser los mecanismos lógicos de razonamiento los que mejor se adaptan a ese género, como el de razonamiento imperfecto que ignora lo obvio (tuit 8). No obstante, coincidimos con Simarro (2016) en que la clasificación de mecanismos lógicos defendida por estos autores «resulta incompleta y, en algunos casos, inexacta», ya que lo que sucede a veces es que el texto y la imagen que le acompaña generan nuevos significados.
Tuit 8
Quizá sea por esa falta de resolución explícita, así como por la ausencia de contacto visual, inmediatez y marcas acústico-melódicas, por lo que algunos no consigan detectar el humor en este formato de microrrelato, e incluso se lleguen a interpelar querellas y denuncias, como vimos en nuestra entrada «Tuits, querellas y parodias». En este sentido, investigaciones como la de Reyes et al. (2013) o la realizada por investigadores del instituto de tecnología Technion en Israel, con las que se busca desarrollar un sistema para la detección de la ironía y el humor destinado usuarios de Twitter con espectro autista, podrían tener también aplicabilidad en toda la comunidad virtual, en general.
Por último, sería interesante analizar la temática de estos tuits desde la perspectiva de género. De hecho, algunas cuentas como @femilustrada o @barbijaputa utilizan en ocasiones el humor y el sarcasmo para hacer visible algunas de las injusticias sociales que sufrimos todavía las mujeres. Según Retajack, Lawrence y Ringrose (2016), las redes sociales permiten que las mujeres defiendan el movimiento feminista desde una perspectiva innovadora y atrayente. Se habla incluso de una cuarta ola feminista caracterizada por el uso de la tecnología y las redes sociales que, a través del discurso digital: memes, vídeos, entradas de blog, etc., están desafiando el sistema patriarcal. Sin embargo, estudios como el de Shifman y Lemish (2010) demuestran que todavía queda mucho por hacer, ya que la mayor parte de muestras humorísticas en la red reflejan un humor sexista, en el que se refuerzan los roles sexuales.
En definitiva, el humor en las redes sociales es un tema que con toda seguridad va a dar mucho que hablar en los próximos años.
REFERENCIAS
Attardo, S., Hempelmann, C. F., & Di Maio, S. (2002). Script oppositions and logical mechanisms: Modeling incongruities and their resolutions. Humor, 15(1), 3-46.
Pano, A., & Mancera, A. (2014). Identidades falsas en Twitter: la ironía y el humor verbal como mecanismos paródicos. Discurso & Sociedad, (3), 507-536.
Reyes, A., Rosso, P., and Veale, T. (2013), A multidimensional approach for detecting irony in twitter, Language Resources & Evaluation, 47, 239–268, doi:10.1007/s10579-012-9196-x
Retallack, H., Ringrose, J., & Lawrence, E. (2016). ‘Fuck your body image’: Teen girls’ Twitter and Instagram feminism in and around school. In J. Coffey, S. Budgeon, & H. Cahill (Eds.), Learning bodies: The body in youth and childhood studies (pp. 85–103). London: Springer.
Ruiz Gurillo, L. (2012). La lingüística del humor en español. Madrid: Arco libros.
Shifman, L., & Lemish, D. (2010). Between feminism and fun (ny) mism: Analysing gender in popular internet humour. information, Communication & society, 13(6), 870-891.
Simarro Vázquez, M. (2016). Mecanismos de humor verbal en Twitter. Caracteres, 5 (2), 32-57.